El Museo de la Ciudad suena a carcajada de persona mayor. Hay una escena que me enternece especialmente: una pareja de ancianos se para enfrente de una de las viñetas, comentan algo y se ríen. Lo entienden y se entienden. Es su historia, su lenguaje y su humor del que hacen complicidad, bonito ¿verdad?. Estamos en Madrid, en la primera planta del Museo de la Ciudad y sus habitaciones albergan estos días una exposición dedicada a “la Codorniz”.
Creada para conmemorar el setenta aniversario de la creación de la revista, la muestra está centrada en los ilustradores que trabajaron en ella. Dibujos colgados en la pared, agrupados por autores, llenan las estancias. Desde 30zores3 a X.Marín pasando por Azcona, Chumy Chúmez, Forges, Gila o Mingote, están expuestas obras de 43 creadores diferentes. En el centro de las salas unas mesas muestran una selección de revistas de cada una de las épocas de “la Codorniz” acompañadas de unos carteles explicativos con las líneas que marcaron las etapas de cada uno de los directores: Mihura, su creador ; Álvaro de la Iglesia, el que más tiempo estuvo y Summers y Cándido los que intentaron sacarla adelante en su recta final. No solo nos hablan de la revista, también de sus antecedentes (La Ametralladora) y de su más destacado competidor (Don José). Tan solo veo una carencia en el muestra, falta contextualizar algo más la revista dentro de su época.
Se necesita tiempo para leer (y reír) con cada uno de los chistes, para comprender la crítica de la que se hacían eco en sus etapas más revolucionarias, para admirar el humor absurdo. Humor ¿no es eso lo que nos falta hoy en día? Las viñetas de la Codorniz nos dan perspectiva de otras crisis, de la carencia de trabajo, de los sueldos bajos de todas las épocas, de la absurdez de determinados políticos… Está de actualidad, va siendo hora de resucitarla.
Hasta el 15 de abril de 2012. Entrada gratuita.