Un antiguo colmenar, el viejo molino harinero y la carbonera tradicional. Son algunas construcciones etnográficas que nos muestra la Senda de los Oficios de la Vida por La Hiruela, uno de los pueblos más bonitos de Madrid.
La Hiruela es uno de cinco pueblos de la Sierra del Rincón, la Reserva de la Biosfera que está en el noreste de la Comunidad de Madrid, junto a Guadalajara y sus pueblos de arquitectura negra. Para mí, la zona con más encanto de toda la región: montañosa, con ríos y riachuelos, pequeños pueblos que conservan su arquitectura tradicional, bosques y senderos por los que pasear. Y aislada.
De cada uno de los pueblos de la zona parten cuatro senderos señalizados y llenos de encanto que discurren por los alrededores, mostrando la vegetación, sus paisajes y, algunos, los valores etnográficos. Como la senda de los Oficios de la Vida.
Este camino temático parte del pueblo y nos enseña los trabajos que se desempeñaban antaño en la región a través de sus construcciones, enclavadas todas en un paisaje de ensueño.
El recorrido
Dejamos el pueblo por un camino que pasa entre huertas de frutales. Vamos encajonados entre paredes de piedra que acotan las huertas de alrededor. Si queremos conocer más sobre la vegetación de la zona podemos leer los carteles que, cada pocos pasos nos informan de las plantas que nos vamos encontrando y es que, el recorrido en esta primera parte, coincide con una senda apibotánica.
La apicultura es uno de los oficios tradicionales de la zona. Poco tiempo después de empezar a caminar, y tras abrir una cancela, llegamos a un antiguo colmenar rehabilitado. Es un cercado donde podemos contemplar las colmenas de tronco que se utilizaban antaño y que estaban hechas con corcho y chapa. La miel se extraía con la técnica de prensado que aportaba más sabor y mayor concentración de polen sin embargo ya no se utilizan este tipo de troncos.
Volvemos al camino principal y seguimos el sendero para encontrarnos con uno de los antiguos molinos harineros. Este molino se utilizó hasta mediados del siglo XX y está en un área recreativa, con cerezos y saucos, junto al Jarama. El río aquí hace de frontera entre Madrid y Guadalajara y muy cerca se encuentra el aula de apicultura.
De nuevo en la senda, subimos hasta la carretera, caminamos unos metros por ella y la cruzamos para acercarnos hasta la antigua carbonera. En estas carboneras se hacía el carbón de roble y brezo hasta los años 60 aproximadamente. Todo un negocio para La Hiruela que vendía el carbón a los pueblos de alrededor.
Desde la carbonera, volvemos a la carretera y tomamos el último tramo del camino que nos lleva de vuelta al pueblo pasando por una pequeña capilla dedicada a la Virgen de Lourdes.
Perfil de ruta.
Es una senda circular de 2,5 kilómetros que se recorre, con calma, en hora y media. Está señalizada con balizas con flechas naranjas y en todas ellas aparece su nombre. Parte de su trazado coincide con la senda de Molino a Molino y, al finalizar la ruta podemos enlazar con la de La fuente del Lugar, de media hora de duración.
El podcast de Caminantes en Radio 5
Y si lo queréis en podcast, podéis escuchar Caminantes por la Senda de los Oficios de la Vida.