No es fácil llegar al pódium cuando la competencia es muy grande. No es sencillo destacar ante la inmensidad de un paisaje. Tampoco lo es comunicar por encima del rugido de las olas del mar. Y por supuesto parece muy difícil llegar a escalar por encima de unas montañas que enamoran. Asturias lo tiene todo – no es cuestión de peloteo – y también si lo analizamos a nivel de turismo activo. El descenso del Sella o la Ruta del Cares son un must si nos acercamos al norte, pero otro plan diferente y familiar también es elegido por miles de personas todos los años. Hablamos de la Senda del Oso. Quizás, la vía verde más famosa de toda España. Quizás, la que ofrece un encanto especial entre túneles, historia y vistas. También, aquella que no se le escapa a los amantes de los animales.
Gracias a mucho trabajo esta actividad se ha subido al pódium del turismo activo en Asturias. Nosotros, que hemos venido aquí a disfrutar, necesitaremos menos esfuerzos para completar el recorrido. Es simplemente cuestión de echarle ganas y pedalear.
¿Qué es la Senda del Oso?
Situada en el centro de Asturias, la Senda del Oso es una vía verde ciclista y peatonal que aprovecha el trazado de las antiguas vías del ferrocarril minero. Por estos lares se transportaban grandes cantidades de carbón desde Teverga y Quirós hasta Tuñón, y hoy en día es el paraíso de las bicicletas, los osos y las fotografías.
Su recorrido total alcanza los 40 kilómetros – en el mapa podemos ver su forma de Y – y recibe este nombre debido a que pasa justo al lado del cercado del oso de San Adriano. Allí viven en semilibertad cuatro ejemplares de oso pardo que no han podido adaptarse a la vida salvaje por diversas circunstancias. Paca, Tola, Molina o Furaco algunos días se convierten en protagonistas de la senda que les honra, aunque si estamos en invierno no tendrán demasiadas ganas de posar para los ciclistas curiosos.
El cercado se encuentra muy cerca de la población de Proaza, tiene una superficie de 47.000 metros cuadrados y está gestionado por la Fundación Oso de Asturias (FOA). A su lado tenemos un gran aparcamiento y numerosas instalaciones. Se puede llegar en coche, claro, pero tiene más encanto llegar hasta allí recorriendo la Senda del Oso.
Recorrido
Existen varias opciones para recorrer la Senda del Oso. Nosotros decimos hacerla por la mañana – un tramo, no los 40 km – para aprovechar la tarde para otras visitas. Comenzamos en Entrago y finalizamos en Proaza, completando uno de los tramos más sencillos y populares que te permite observar el cercado de los osos (está justo al lado de Proaza) y además tiene la ventaja de ser en descenso continuo.
En total, hablamos de una ruta de 14 kilómetros que se puede recorrer en 2-3 horas en función de las paradas que decidas hacer. Para completar la ruta tomamos un desvío en Caranga de Abajo en dirección al embalse de Valdemurio. Merece la pena hacerlo, aunque sea un tramo de subida, ya que las vistas son diferentes y encontraremos un buen lugar para realizar nuestro avituallamiento.
Desde ahí toca lanzarse cuesta abajo hasta el cercado de los osos y, si llegamos con tiempo, recorrer Proaza y disfrutar de un buen refrigerio en la plaza del pueblo antes de que nos recoja la empresa que nos ha prestado las bicicletas. De allí nos llevarán al punto de inicio para continuar con nuestro día de turismo por Asturias.
¿El precio? Muy barato, entre 15-18 € por persona dependiendo de la época del año y de la empresa. Lo mejor es que incluye el alquiler de la bicicleta y la recogida en coche. Por supuesto, las empresas también te proporcionan el casco, que es OBLIGATORIO. Existen otras muchas opciones para hacer la Senda del Oso, ninguna es complicada, pero la que aquí os contamos yo creo que es la más sencilla y accesible para todos los públicos
Nosotros nos cruzamos con personas mayores, grupos de amigos, familias, niños de todas las edades, perros…..e incluso una excursión de adolescentes que no lo iban pasando muy bien.
Recomendaciones
- Consulta la previsión del tiempo antes de salir. Ten en cuenta que la senda va paralela a un río y además atraviesa túneles que tendrán humedad a primera hora de la mañana. Es decir, recuerda que estás en el norte y nunca está de más llevarte una rebequita para primera hora. Nosotros la recorrimos en febrero y echamos en falta unos guantes.
- No hace falta estar muy en forma. Además, siempre tienes la posibilidad de bajarte de la bicicleta y empujar. Eso sí, si no te ves muy preparado descarta el desvío hacia el embalse de Valdemurio.
- En los túneles tienes que tener cuidado. Están iluminados a tramos y te puede dar un poco de impresión eso de pedalear en la oscuridad. Si no lo ves claro, lo mejor es poner pie a tierra y empujar la bici antes que darte un buen coscorrón.
- Debemos cruzar la carretera en algunas ocasiones. Hay buena visibilidad, pero todas las empresas recomiendan bajarse de la bicicleta para hacerlo con seguridad.
- Prepara tu mochila con agua, comida y crema solar. Y, por supuesto, cámara de fotos para retratarte como un buen “globero” pedaleando por la Senda del Oso.
Más actividades por la zona.
Como siempre, las posibilidades son múltiples cuando nos encontramos en un lugar tan maravilloso como Asturias. Si queremos ciudad, Oviedo está a menos de una hora y tiene mucho que ver. Su centro histórico merece la pena y nunca está de más descubrir la vetusta ciudad de la Regenta.
Si queremos historia, la Cueva Huerta en Entrago nos ofrece numerosos tesoros para descubrir de la historia de la zona. Sus 14’5 km la convierten en la segunda cavidad más grande de Asturias y su visita es muy interesante.
Visitar Tuñón, Villanueva o Quirós – los otros ítems de la Sierra del Oso – también puede ser una opción para completar la actividad. Nosotros, que nos alojábamos en el Valle del Privilegio, aprovechamos para disfrutar un poco más de esta zona.
En resumen, las opciones son tan amplias que acaban por hacernos olvidar todas las excusas. La Senda del Oso es una actividad tan diferente como sencilla de realizar. Un oportunidad cercana, de esas que merecen la pena porque combinan deporte, naturaleza e historia. Una forma diferente de descubrir Asturias, una forma genial de acercarnos un poquito más al paraíso.
Muy buena lectura sobre la ruta de la senda del oso amigos ¡Gracias!