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A por uvas y a lo loco

La vendimia en el mayor viñedo de mundo

Hoy toca brindar. Y lo hacemos en La Mancha. Nos acercamos hasta Tomelloso para vendimiar, pisar uva y visitar tres bodegas muy diferentes entre sí, pero con algo en común: las tres producen vino Denominación de Origen de La Mancha.

Esta excursión enoturística es estacional, tan solo se puede vivir en un momento concreto del año; unos días en los que el olor, el sonido y la actividad de Tomelloso cambian completamente.

Nuestro anfitrión es Selfie Tour, una agencia de viajes y receptivo turístico ligado a la Ruta del Vino de La Mancha que, entre otros viajes, organiza experiencias enoturísticas por la zona de Tomelloso y alrededores.

Versión radiofónica de la vendimia en “El gallo que no cesa” (RNE)

La vendimia tiene su aquel

Enoturismo para conocer la cultura del vino

El enoturismo está de moda y para demostrarlo, unas cifras. Según ACEVIN (Asociación Española de Ciudades del Vino a la que pertenecen la mayor parte de las Rutas del Vino del país), las bodegas y los museos relacionados con la cultura vitivinícola reciben unos 3 millones de visitantes al año. Y estos turistas gastan unos 80 millones en estos establecimientos.

Las cifras reales son mayores ya que estos datos solo tienen en cuenta las Rutas del Vino que pertenecen a ACEVIN y determinados tipos de establecimientos (bodegas y museos del vino). No recogen otros gastos de este tipo de turistas.

¿Qué es una ruta del vino?

Son organizaciones vinculadas a un territorio y a una Denominación de Origen a las que pertenecen bodegas, museos del vino, restaurantes, alojamientos, agencias de viajes, centros de información… y que promueven el enoturismo en la zona, es decir, aquellas experiencias relacionadas con la cultura del vino.

 ¿Qué actividades se organizan?

Las más comunes son las visitas a viñedos y bodegas para conocer el proceso de elaboración del vino, museos que muestran cómo se elaboraba este producto en el pasado o degustaciones y catas. Sin embargo, también está incluida cualquier experiencia ligada al territorio como gastronomía, visitas a monumentos, patrimonio etnográfico, rutas senderistas…

Al fin y al cabo, el vino es parte de un territorio y de una cultura que incluye muchos aspectos.

En determinadas épocas, como durante la vendimia, también algunas rutas ofrecen actividades como recogida y pisado de la uva.

¿Cuántas rutas de vino hay?

En España, existen 30 rutas del vino, entre ellas la de La Mancha que engloba seis localidades repartidas entre Ciudad Real (Tomelloso, Campo de Criptana, Alcázar de San Juan y Socuéllamos), Toledo (El Toboso) y Albacete (Socuéllamos)

La vendimia en Tomelloso

<<Venimos de vendimiar/ de la viña de mi abuelo/ y no nos quieren pagar/ porque hemos roto un puchero/ porque hemos roto un puchero/ venimos de vendimiar>> Jota de la vendimia

Viñedos, viñedos y más viñedos. Llegamos a La Mancha y la gran llanura se convierte en una enorme extensión de vides. Esta región – que comprende zonas de Albacete, Ciudad Real y Toledo – ha sido bautizada como el “mayor viñedo del mundo”.

La mayor parte de los frutos blancos son de airén y la uva negra, tempranillo. Se cultivan en vaso o en espaldera y la vendimia se hace tanto de manera mecánica como manual.

En medio de los viñedos, cada cierto tiempo, aparecen construcciones ligadas a la actividad: casas de campo encaladas o, su versión más tradicional, los bombos.

Nos detenemos en uno de estos viñedos. Pertenece a Chicho Avendaño, el propietario de Selfie Tour que nos arma con el material necesario para recoger la uva: sombrero, unas tijeras especiales para la labor y cubos o capazos en los que ir soltando los frutos.

Las uvas que tenemos delante son de la variedad más popular en La Mancha, airén, y el sistema de guía en espaldera. <<Esto es en espaldera o emparrado. Están más en alto, ¿qué evitamos con esto? Que estén en contacto con el suelo y, si hay un tiempo más húmedo, que se pudran las uvas. Así el fruto siempre van a estar más sano>>.

Este método de cultivo tiene otras ventajas: la recogida resulta más fácil ya que, al tener las guías, los racimos están más altos y, en un momento dado, se puede automatizar.

En nuestro caso, como herramientas, utilizamos nuestras manos y unas tijeras. Solo falta conocer la técnica. <<¿Cómo se vendimia? Pues mi fácil. Todos los sarmientos van a tener por sistema dos racimos de los cuales sale una puntita que es la base de la cual engancha todo el racimo. Pues hay que cortar esta puntita>>.

Rellenamos nuestros cubos en menos de media hora, tiempo suficiente para darnos cuenta de la dureza del trabajo del campo que, unos viñedos más allá, realizan unos jornaleros de manera manual.

Una comida a la altura de las circunstancias: migas de gañanes

Migas de gañanes

<<Pa que estén güenas las migas/ hace falta preparar/ un buen cacho de chorizo/ las ugüas y las tajás/ las ugüas y las tajás / pa que estén güenas las migas.>> Jota de la vendimia

El esfuerzo físico de este trabajo (que no del nuestro) requiere una comida a la altura de las circunstancias. Nada mejor que unas migas manchegas. Esta receta tiene todos los requisitos necesarios para ser el plato estrella del campo: calórico y económico, además, permitía aprovechar el pan duro.

Nuestro cocinero, Narciso, el padre de Chicho, las ha preparado con leña. <<Esto lleva chorizo, panceta, ajo y un poquito de pimentón>>. Las comemos acompañadas de uvas recién recogidas. <<Esto era comida para los pastores y gañanes casi de supervivencia. Porque nos veníamos aquí al campo para 14 y 15 días. Tardábamos dos horas y tres horas en llegar al pueblo con el carro y las mulas, entonces nos traíamos un costal de pan y te duraba quince días. El pan se ponía duro y quién le echaba el diente. Entonces hacías migas>>.

Los bombos, paisaje etnográfico de los campos de Tomelloso

Un bombo encalado (no es lo habitual)

Tengo debilidad por el patrimonio etnográfico de los lugares que visito. Por esas construcciones populares levantadas por los propios habitantes de la zona. Están hechas con material local y sin grandes pretensiones. Simplemente son útiles y se han ideado y mejorado con el paso de tiempo y las aportaciones de la comunidad. Además, dan información sobre los modos de vida del sitio, muchas veces desaparecidos o en desaparición.

En Tomelloso, la construcción más popular es el bombo, un tipo de casa de campo abombada y hecha de piedra caliza. Aparecen entre las extensiones de viñedo y se usaban como refugio durante las temporadas que se pasaban en el campo.

<<Hicieron una construcción de piedra seca, sin utilizar ningún tipo de argamasa, solamente con la piedra, puesta de una forma muy estratégica, para que una piedra sujete a la otra y puedan hacer una bóveda y dejar por dentro una o dos estancias dependiendo del volumen del bombo>>.

La uva también ha sido la causante de otro tipo de construcción, en este caso ya en las afueras de Tomelloso o incluso dentro de la localidad. Son las chimeneas de las alcoholeras, donde se destilaba el vino. Hubo más de cien, ahora permanecen en pie una treintena que forman parte del paisaje urbano e industrial de la ciudad.

Museo del carro

Y para seguir profundizando en el patrimonio etnográfico de Tomelloso, nada mejor que una visita al museo del carro y aperos de labranza. Su exposición muestra todo tipo de enseres que se utilizaban, hasta hace unas décadas, para las labores del campo y la elaboración del vino y del alcohol. Han sido donadas por los vecinos del pueblo.

<<Está expuesto de forma secuencial conforme se va utilizando en el campo. Hemos empezado desde el cultivo, los arados y tal, luego las galeras para transportar el vino y aquí hay una pequeña recreación de lo que es una de las cuevas de Tomelloso porque Tomelloso está todo hueco por debajo. Hay más de 2.000 cuevas>> cuenta Chicho Avendaño.

Por tener tiene hasta la recreación de un bombo que se puede visitar por dentro.

Pisando la uva en una bodega subterránea

Bodegas de las de antes

<< Cuando pisa racimos/tu abarca verde,/ tu pie se vuelve sangre,/mi sangre nieve./ Pisa la uva,/ que como mis amores/ ya son maduras.>> Miguel Hernández

La primera capa de suelo en Tomelloso es dura, pero si rascas un poco, aparece una tierra más blandita, de una composición arcillosa, que ha propiciado la construcción de cientos y cientos de bodegas que hoy, eso sí, están en desuso.

Entramos en una de ellas, fundada en 1900, las bodegas Perales. Allí se conservan los utensilios y la maquinaria utilizados para elaborar vino hace tres décadas. También la arquitectura tradicional. El propietario de Selfie Tour nos explica. <<Las cuevas normalmente tienen entre 6 y 7 metros de anchura y esta en concreto tiene 40 metros de largo. ¿Por qué 6 o 7 metros? Es el espacio máximo para que aguante esa bóveda natural>>.

Después de visitar las instalaciones, bajar a la cueva y descubrir cómo se trabajaba hace tan solo unos años, llega el momento de descalzarse, lavarse los pie, subirse los pantalones y meterse en faena. Toca pisar la uva recogida esta mañana. Una experiencia pringosa y placentera.

De dos en dos nos metemos en los barreños, llenos de uvas, y – como si fuese una danza (<<ese es el origen de la jota>>) pasamos los siguientes minutos estrujando el fruto y sacando el mosto que hay en su interior.

Se extrae un zumo dulce y exquisito con múltiples utilidades. Sirve para bebérselo tal cual, pero también para fermentarlo y hacer vino, para convertirlo en alcohol, preparar recetas y, concentrado, como edulcorante. De hecho, un gran porcentaje de la uva manchega está destinado a la industria alimentaria. Se utiliza en zumos, refrescos, etc.

 De lo de siempre, a lo actual

Colores, olores y experiencias que solo se pueden vivir en vendimia

 <<Aunque me ves que me ves/ que me ves que me caigo/ es una chispa de vino/ morena que traigo./ Aunque me ves que me ves/ que me vengo cayendo/ es una chispa de vino/ morena que tengo.>> Jota de la vendimia

Lo de La Mancha con la uva es superlativo. Con cerca de 500.000 hectareas de viñedo (170.000 en la D.O.), la región recibe el apelativo del viñedo más grande del mundo y, en Tomelloso se encuentra la que dicen que es la mayor bodega de la Tierra también. Con semejante producción es normal que el trabajo haya evolucionado y que, hoy en día, las elaboraciones sean más modernas.

Durante el viaje, también visitamos bodegas donde los procesos están automatizados. En concreto vimos tres de tamaños muy diferentes: Virgen de las Viñas (la mayor cooperativa vinícola del mundo), Vinícola de Tomelloso (mediana) y Casaquemada (una empresa familiar).

Vinícola de Tomelloso: la evolución de lo tradicional

Vinícola de Tomelloso

Vinícola de Tomelloso existe desde hace más de 30 años, sin embargo sus raíces vienen de lejos. Esta cooperativa fue fundada por varias familias que tenían sus bodegas (en muchos casos subterráneas) en el centro del pueblo, entre ellas la familia Perales (donde estuvimos pisando uva).

El edificio que nos da la bienvenida a la bodega es una construcción típica manchega de una planta, encalada, con enrejados en la ventana y tonos añiles.

A pocos metros hay unas cuantas vides. Están ahí para que los visitantes conozcan los tipos de uva que se utilizan en sus vinos y algunos de los métodos de producción ecológica implementados en sus viñedos; entre ellos, uno muy tradicional: plantar un rosal delante de la hilera de vides ya que las plagas suelen atacar primero al rosal y, así, el propietario tiene tiempo de actuar antes de que el insecto llegue a la uva.

Visitamos la bodega en plena vendimia. La actividad es frenética y bastante diferente a otros momentos del año. El olor, los sonidos, los colores cambian durante septiembre y parte de octubre. Y el trabajo también.

Descargando la uva

Cada poco tiempo aparece un camión para descargar las uvas que trae en su remolque. En la zona de recepción analizan rápidamente el fruto y, según su calidad, deciden su destino. Después, vuelcan el contenido en las tolvas. Tras el despalillado (la separación del fruto del raspón), llega el momento de prensar la uva.

Carmen Ramírez de Vinícola de Tomelloso nos explica todo el proceso, desde que la uva entra en la bodega hasta que sale embotellada. <<Esta es la sala de prensas. Lo que veis aquí son cuatro prensas. Se extrae el zumo de la uva que es el mosto, pero sin presionar demasiado porque sino comprimiríamos lo que son las semillas, las pepitas de la uva, y se obtienen una especie de aceites amargos que no nos interesaran para el vino>>.

El proceso de elaboración del vino blanco y el tinto es diferente. En ambos casos, una vez obtenido el zumo, este pasa a la sala de vinificación. <<Este proceso consiste básicamente en tres partes: fermentación, clarificación y filtrado>>.

Una vez más, la secuencia del blanco y el tinto varía. Al igual que también es diferente la maceración en barricas de madera. Precisamente, durante la visita a la sala de barricas, hacemos una cata de dos de los vinos de la bodega: Torre de Gazate y Añil. <<A mí me huele a un árbol cuando florece. A fruta, pero fruta blanca. Me huele a paraguayas>>.

En el almacén y en la sala de embotellado, en esta época donde todo el trabajo se acumula en otras estancias, hay poca actividad.

El mastodonte del vino: Virgen de las Viñas

Virgen de las viñas de noche

2.000 cooperativistas forman parte de Virgen de las Viñas, la bodega más grande de Tomelloso, España, Europa y – dicen- que del mundo entero. Durante la vendimia, la actividad es frenética, sobre todo cuando cae el sol y llegan los tractores con los remolques llenos de uva para descargar.

Se colocan en fila esperando su turno. Mientras, algunos trabajadores toman algo en la cantina. Les acompañan sus parejas e incluso sus hijos. Al fin y al cabo es sábado y, aunque durante la vendimia se trabaja todos los días, también hay tiempo para una pausa.

La visión de esta macrobodega impresiona. Los camiones, la zona de recepción, los depósitos, pero también los ruidos, el olor y la mecánica incesante del trabajo crean una coreografía que, con las luces de la noche, es especialmente llamativa.

Vino artesano: Casaquemada

Los vinos de Casaquemada

De la actividad frenética, en menos de media hora, pasamos a la tranquilidad más absoluta. Nos preparan la cena en las instalaciones de una bodega familiar que han abierto esta noche exclusivamente para nosotros: Casaquemada.

Para los propietarios de la bodega, los hermanos Sergio y Ernesto García, la calidad está reñida con la cantidad. Y esta máxima la trasladan a sus productos. <<Vamos a muy poquita producción en la viña porque a lo que vamos es a vino de calidad. Todos nuestro vinos, además, son vinos de guarda, todos van a barrica>>.

Uno de los métodos que emplean para mejor el vino es la vendimia nocturna, es decir, empiezan a trabajar cuando todavía no ha amanecido. <<¿Por qué? Porque lo que queremos es coger la uva lo más fresca posible. Que entre al depósito lo más fresca posible>>.

Visitamos la bodega y llega el momento de probar sus vinos. Sobre todo elaboran tintos. Etiquetan Brincho de Casaquemada, Alba de Casaquemada, Hacienda de Casaquemada y Anea de Casaquemada.

¿Cuál es mejor? La respuesta, de nuevo, sale de Ernesto. <<El mejor, el que a ti te guste>>. Y por supuesto <<disfrutarlo en buena compañía>>.

Algo que hemos hecho durante este fin de semana en compañía de Selfie Tour (gracias por la invitación) y gracias también a todos los que nos han atendido en las bodegas, rutas, comidas y experiencias.

Comida abundante y contundente

Arrope, vino, mistela y mostillo.

<<Pa que estén güenas las migas/ hace falta preparar/un buen cacho de chorizo/las ugüas y las tajás>>

La comida tradicional de La Mancha es contundente, sabrosa y se sirve de forma abundante. Durante el fin de semana, nos metimos entre pecho y espada migas de gañanes, gachas manchegas (de harina de almortas), pisto, asadillo, morteruelo (una especie de paté hecho con hígado de cerdo y carne de caza), gazpacho manchego (que no tiene nada que ver con la versión vegetal andaluza o extremeña) y duelos y quebrantos (ligerito: huevo, chorizo y tocino).

Evidentemente no podía faltar el queso manchego que, en ocasiones, se servía acompañado por una elaboración que solo he probado aquí: arrope, un dulce de textura parecida a la miel, pero preparado con concentrado de zumo de uva, o mostillo, hecho con arrope, harina, cascara de limón, canela y otras especias, de apariencia similar al membrillo.

Patrimonio y territorio

¿Molinos o gigantes?

La cultura del vino también está ligada al patrimonio. Así que el domingo visitamos los molinos de Campo de Criptana (uno de ellos es el museo de Sara Montiel) e hicimos una ruta literaria siguiendo los pasos de don Quijote y Sancho Panza por El Toboso, pueblo de Dulcinea. Pero esta experiencia, que se puede vivir en cualquier momento del año, la dejamos para otro post.

Enlaces prácticos

Selfie Tour es la agencia que organiza estos tours con recogida en Madrid y otros puntos. Han sido los que nos han invitado a disfrutar de esta actividad.

Vinicola de Tomelloso

Restaurante Plinio

Cooperativa Virgen de Las Viñas⠀

Bodega Casaquemada ⠀

Cultura Itínere (guía en El Toboso)

Restaurante Cueva La Martina (Campo de Criptana)⠀

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