Ir de tiendas, de mercados o de mercadillos en Londres es una mezcla entre cultura, compras y turismo y no hay alternativa, hay que experimentarlo sí o sí. Eso sí, nada de recorrer Oxford Street, Regent St. o King’s Road, para entrar en los almacenes de grandes cadenas o firmas. Nos vamos de compras pero el dinero no importa, porque ver escaparates y disfrutar del ambiente,Ef$gt” es una actividad tan satisfactoria como entrar en un museo. Y gratis.
Camden Market en Camden Town. Todos los días.
Turístico pero obligatorio. El barrio donde vivió y murió Amy Winehouse es un hervidero de culturas aunque copado sobre todo por turistas. Por este motivo, y porque los sábados y domingos hay alternativas, es mejor evitarlo el fin de semana. Prepárate para ver las tiendas más extravagantes, los puestos más raros y a probar, por 4 o 5 libras, comidas (o pseudocomidas) de todo el mundo. No hay que perderse la gente, las fachadas de las tiendas, decoradas con todo tipo de “esculturas”, Cyberdog, los puestos de comida, el canal, los establecimientos de segunda mano y por supuesto, fijarse en la antigua estructura del mercado de caballos.
Los sábados en Portobello Road.
Portobello Road es una calle llena de casas de colores, con tiendas autóctonas de antigüedades, boutiques de autor, comida… en pleno barrio de Nothing Hill. Los sábados, los establecimientos sacan sus puestos a la calle y la zona se anima una barbaridad. Si lleváis un tiempo en Londres y echáis de menos la comida española, podéis entrar en la tienda de los Hnos. García. Productos españoles, precios más que ingleses.
Los domingos a Brick Lane.
Si quieres recorrer puestos de antigüedades (y con todo tipo de cacharros), sumergirte en los olores de una torre de Babel de comidas, comprar algún recuerdo y ver a gente de todo tipo, los domingos Brick Lane es tu sitio. La zona también se conoce como Banglatown, por la cantidad de gente de Bangladés que vive en ella, ¡hasta sus calles tienen el nombre escrito en los dos idiomas!. Para llegar, la estación más cercana es Liverpool Street.
Harrods (unos grandes almacenes de lo más kitsch).
Los almacenes Harrods, en el barrio de Knightsbridge, más que una tienda son un símbolo londinense y con solera; de hecho, llevan abiertos desde 1834. Si vais, visitad la tienda de recuerdos (para que veáis todo lo que se puede inventar para los turistas), babead en la zona gourmet y asombraos con la escalera (kitsch) de inspiración egipcia y su memorial a Lady Di. ¿Que, a qué se debe? Cuando murió la princesa Diana, en un accidente de tráfico, perseguida por los paparazzi en París, iba acompañada de su novio, Dodi Al-Fayed, hijo del que era dueño de los almacenes. De película (de los años 80). Hoy en día, Harrods pertenece a la realeza catarí.
La zona de Covent Garden y su mercado (sobre todo en Navidad a mí me encanta).
Covent Garden es una zona de restaurantes, pubs y tiendas en el Soho. ¡Entrad al mercado de la plaza! Antiguamente era un mercado de frutas y verduras y hoy, su estructura aloja tiendas de todo tipo: souvenirs, cuadros, restaurantes… La zona es especialmente “mona” en Navidad, aunque realmente, lo que merece, merece la pena, son las actuaciones de los artistas y músicos callejeros. Suele estar abarrotado de turistas y si compras algo, se paga.
Libros flamantes y con polvo
Por Waterloo hay un montón de librerías con material de segunda mano y nuevo. Especialmente tranquila y bonita es la calle peatonal de Cecil Court. Charing Cross Road, mucho más grande, alberga tiendas de libros para aburrirte.
Y no acaba aquí la cosa. Para los amantes de las compras, Londres es una ciudad que ofrece artículos de todo tipo. Ropa de segunda mano, grandes firmas, boutiques de diseñadores, antigüedades, delicatessen, objetos para coleccionistas, grandes almacenes… Si vas con dinero y quieres, compra. Sino, observa. Nunca te aburrirás.
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